Nadie está exento de haber regalado a un amigo una pastilla para el dolor o la gripe; o viceversa, ¿cuántos no hemos recibido remedios de terceros? 

 También existen los que juegan al ensayo y error: personas que en el pasado tomaron un remedio que les alivió una dolencia particular y, a partir de allí, consumen dicho medicamento para cada dolencia similar a la que padecieron, sin saber si existe una verdadera correlación. 

 Así como éstas, existen muchas otras razones; lo cierto es que la automedicación se ha convertido en un problema serio en Chile.

 Según estudios del Centro de Información Toxicológica de la UC, la automedicación es una problemática nacional, porque los fármacos ocupan la primera causa de intoxicaciones del país (58%), seguido de los útiles de aseo, con tan solo un 18%.

 


 

¿Qué es la automedicación?

Aunque, en apariencia, la pregunta parece sencilla, la verdad es que no lo es. Muchas personas consideran que tomar un antigripal o una pastilla para dormir no es sinónimo de automedicación. 

 “Automedicarme implica tomar una decisión sobre mi salud y de esa forma obtengo y utilizo un fármaco sin prescripción médica, por lo que el medicamento elegido no necesariamente es el adecuado para lo que yo estoy cursando”, asegura la química farmacéutica del CITUC, Lorena Silva. 

 “Así mismo los individuos que representan mayor riesgo ante la automedicación son los niños, adultos mayores, pacientes con enfermedades crónicas y aquellos que requieren polifarmacia, es decir, que consuman varios fármacos de manera fija”, agrega Silva.

 

¿Cuán peligrosa es la automedicación?

En Chile, los medicamentos de venta libre constituyen cerca de un 15% del mercado total, esto significa que se consumen alrededor de 33 millones de unidades al año. 

 

Birgit Müller, médico familiar de Vidaintegra, explica que la automedicación implica graves consecuencias: prolongar o agravar una patología, seleccionar una farmacoterapia incorrecta, conducir al uso inadecuado y peligroso de medicamentos, contribuir al fenómeno de la resistencia a los remedios. 

 

Por ejemplo, los pacientes recurren reiteradas veces al uso de la aspirina o migranol. Estos medicamentos son complejos, ya que pueden generar daños severos y efectos adversos.

 

¿Por qué los chilenos se automedican?

Un estudio del Instituto de Salud Pública (ISP) mostró que, durante el primer trimestre del 2018, los chilenos adquirieron más de 11,6 millones de cajas de medicamentos; es decir, compraron en farmacias más de 1,8 millones de pastillas diarias.

 Los datos del estudio indican que los mayores fármacos adquiridos son antiinflamatorios y analgésicos (58%); es decir, se vendieron aproximadamente 97 millones de pastillas. La mayoría sin necesidad de receta médica.

 "La gente en Chile trata síntomas, pero no enfermedades. Le duele algo y se toma una pastilla que piensa que es correcta, en vez de buscar la causa y eso, desde el punto de vista médico, es gravísimo", Enrique París, ex presidente del Colegio Médico.

 

 Alta peligrosidad: la automedicación en los adultos mayores

 

¿Sabías que … 

  • Entre un 65 y 90% de los adultos mayores consumen algún medicamento (OMS)?

  • En Inglaterra, los adultos mayores consumen el doble de fármacos respecto de la población general?

 

Según un estudio de la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid), los adultos mayores tienden a tomar más medicamentos por cuenta propia que el común de las personas adultas. Entre las razones más frecuentes se identifica el deseo de aliviar molestias ocasionadas por el desgaste físico y psicológico propios de su edad. 


 El informe asegura que el abuso de medicamentos puede ocasionar, en los adultos mayores, vértigos, mareos, intoxicaciones, alergias, confusión mental, rigidez en el rostro y articulaciones o temblores del cuerpo y hasta daño renal.


 “La automedicación en los adultos mayores es más peligrosa que en cualquier otro grupo poblacional, ya que suelen asimilar los medicamentos de diferente manera y se incrementa la posibilidad de presentar reacciones adversas”, asegura el asesor de la Digemid, Leandro Huayanay Falconí.


 Además de la automedicación, los adultos mayores son los que más cometen errores a la hora de ingerir remedios o cumplir con tratamientos médicos, lo cual puede desgastar su salud considerablemente. 


 Razones por las que los adultos mayores pueden saltarse o confundir medicamentos

 Expertos en el área han determinado algunas causas que llevan a los adultos mayores a equivocarse en la ingesta de medicinas o fallar en sus tratamientos. Es importante tenerlas en cuenta: 

  • Pérdida de memoria (olvidan el horario del tratamiento).

  • Incapacidad para recordar la instrucción correcta o si han tomado el medicamento. 

  • Deterioro de la visión (no pueden identificar el medicamento que deben ingerir). 

 

Chandra Sekar, profesor de la Universidad de Findlay:

  • Debido a diferentes enfermedades, los pacientes adulto mayores no pueden tragar una pastilla sólida de forma oral, lo que los lleva a omitir la dosis.

  • Falta de agua para beber y acompañar una pastilla sólida (especialmente en personas con movilidad reducida), lo que causa el salto de dosis o la ingesta de remedios en el momento incorrecto.


¿Cómo combatir la automedicación?

La automedicación es una práctica que se puede combatir desde varios frentes; desde la formación y educación hasta la evolución de las tecnologías y la legislación. Acá algunas sugerencias:


Más profesionales que puedan prescribir recetas

 Enrique París comenta que hay que aumentar y abrir la posibilidad en algunos hospitales o unidades especializadas para que todos los profesionales del área de la Salud capacitados puedan recetar medicamentos.  

En este sentido, Mauricio Huberman, presidente del Colegio de Químicos Farmacéuticos y Bioquímicos, asegura que en países como Canadá o Brasil ya se está trabajando en un sistema de recetas prescritas con farmaceutas y otros profesionales sanitarios. 

 

Recetas médicas electrónicas

 Para Jaime Sasso, académico de Química y Farmacia de la U. San Sebastián, es fundamental cambiar el modelo de prescripción médica en papel. Según el especialista, las prescripciones de papel son imposibles de rastrear; el seguimiento sobre el uso que se le da a la receta es inexistente. 

 Por tal motivo, se propone invertir en la generación de una receta médica electrónica, de fácil manejo -ya sea a través de la computadora o el teléfono. Esto permitiría ayudar a mejorar el control y seguimiento de las recetas. Asimismo, facilitaría los procesos, puesto que no es necesario que el paciente vaya cada vez al médico o al especialista para obtener la prescripción. En eso juega un rol importante la telemedicina.

 

Educación farmacológica en el currículum escolar

 Una de las propuestas más interesantes de los especialistas chilenos es la de incorporar la temática sobre el consumo de medicamentos dentro de los contenidos de la Educación Básica y Media nacional -véase de modelo lo que se hizo con el tabaco y el alcohol en pro de generar cambios en los hábitos de las familias-.


 “Es necesario incorporar este tema en el currículum de los colegios, porque también está el problema del acceso y el tipo de información que nos entrega internet. No hay cómo regular eso”, asegura Jaime Sasso. 

 

La automedicación es un problema serio

 ¿Sabías que en Chile se registran intoxicaciones por paracetamol todos los días? Esto lo asegura el especialista Enrique París quien, además, advierte que la mayoría de los antiinflamatorios aumentan la capacidad de infarto al miocardio y hemorragias cerebrales; esto se debe a que dichos remedios retienen sodio y elevan la presión arterial.


 Más allá de las buenas intenciones o soluciones rápidas, es importante hacer conciencia sobre los riesgos de la automedicación. En la salud no se pueden tomar soluciones rápidas; al final, siempre habrá consecuencias y precisamente, es eso lo que debemos evitar, por nuestro bienestar y el de nuestros seres queridos.